Todo luces, movimiento… vida
y por dentro pura soledad.
Has comprendido que sigue existiendo algo más,
algo que tenías y desvaneció en el tiempo.
Y caminas por las calles transitadas,
acompañas tus lágrimas con la lluvia.
Caminas por tu mente atormentada,
buscando el porque de lo que ya no está.
Y es que se han vuelto a despertar tus ganas,
pero caminan en dirección equivocada.
Has despertado del letargo
y ahora sientes que este ya no es tu espacio.
Ineptos, estamos tan seguros de poseer la verdad,
que nos olvidamos de analizar la verdad de otros,
nos olvidamos de ser apoyo sin preguntas,
nos olvidamos de la amistad en nombre el amor.
Antes, durante y después sé amigo,
quizás con el tiempo llegues a ser amante.
Y cuando llegue la hora del amante,
nunca jamás dejes al amigo en la maleta del olvido.
Porque en algún momento las ganas se duermen
y es probable que al despertar
quieran hacerlo junto al amigo.
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Autor: Sole Moreira