Parece… casi perfecto, quizás falte la complicidad de las risas, pero… sigue funcionando. Parece casi perfecto pero, ahora mismo te da más fuerza el aire que se cuela por tu ventana. Entonces miras hacia dentro, intentas encontrar esas ganas en lo que en verdad tienes y la impotencia te gana, el abatimiento se apoderaSigue leyendo «Imán»