Lo dices, lo aceptas y lo vives.
Supe ver cuanto tu corazón ansiaba y… te lo di.
Te lo di mientras tu inconsciencia mostraba mi falta,
y se esmeraba en agudizar lo que yo había perdido.
Ahora, aunque lo fácil sería volver a quien me ama,
en mi presente impera el reto de la búsqueda.
Aquella que me lleva hacia lo que falta,
la que me dirige a otra realidad, la de mi alma.
Quizás tu amor… me llame egoísta
pues tus brazos me tocan y… pienso en el más,
tu risa me llama y… no encuentra la mía.
Me freno a tus avances al sentirme mentira.
Tal vez tu amor se sienta huérfano,
solitario ante mi propia orfandad.
Y, entre quizás y tal vez…
huyas por cuanto ahora no puedo dar.
Me encantaría volver a quien me ama,
pero ahora la batalla impera ante la calma.
Ahora soy yo quien invita a tu inconsciencia,
sin reproches ni coartadas, te invito a mi batalla.
Te he mostrado la necesidad de mi alma.
Cada día compruebas que mi corazón no baila,
ni luce, ni brilla si no lo acompaña el alma.
Enamora pues mi alma, tu amor vencerá mi batalla.
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Autor: Sole Moreira
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