¡Enamórame!
Dame esas gotas de café,
pon a trabajar mis neuronas
mientras bronceas mi día.
¡Sí!
Provoca esa controlada subida de tensión,
el punto justo para emprender movimiento,
pasos firmes hacia la alegría.
Porque yo… yo quiero cantarle al día.
¡Enamórame!
Insufla al día pequeñas gotas que tiñan mi blanco,
puro y correcto blanco exento de sentir.
No abandones mi necesidad de adrenalina.
_______________
Autor: Sole Moreira
Derechos reservados