Atrapé el sueño en mis manos.
Apareciste cuando yo no buscaba
ofreciendo cuanto creía no necesitar.
Si estaba triste, tú creabas la sonrisa,
si el miedo me alejaba, tú me encontrabas.
Y llegaste a encontrarme, atraparme.
Tomando mi mano mientras tus ojos lloraban,
tomando mi boca mientras la sonrisa afloraba,
abrigando mi cuerpo con tu abrazo,
abriendo mi corazón con tus palabras.
Atrapé el sueño en mis manos
y mi ángel sonrió a mi alma.
La palabra pasión volvió a tener sentido,
el cansancio no tenía cabida en mis días,
la mente hervía con nuevos proyectos.
Llegaste para alimentar mi alma, mi cuerpo,
llegaste para recordarme la belleza de la vida.
Y ahora que la pasión se ha dormido,
ahora que es complicado encontrar las risas,
ahora que ya no hablo del resto de mi vida,
cuando el futuro de dos es incierto,
sigue presente el calor del cariño y entendimiento.
Atrapé el sueño entre mis manos
y mi ángel sonrió a mi alma.
Pase lo que pase mantendré mi sueño,
pase lo que pase…mi ángel seguirá sonriendo.
Autor: Sole Moreira
Fotografía: de la red
Derechos reservados