Y miro al cielo cuando amanece
e imagino tu rostro iluminado
iluminando el mío con tu sonrisa.
Te has convertido en mi sol
ese que me sustenta cada día
el que lleva paz y energía a mi día.
Y es que eres luz, color y vida para mi
la posibilidad de volver a creer en los sueños
la ilusión por alcanzar tu luminoso cielo.
Mi regalo, el que no creí posible, perderme en ti.
Llegaste y ahora…ahora quiero mías tus palabras, noches y días.
Quiero tu luz en mi vida.
Y es que…eres el regalo que nunca pedí
ese pedacito de cielo que pensaba ya no existía,
eres…cuanto creía no necesitar y ahora siento necesario.
Autor: Sole Moreira
Fotografía: de la red
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