Redacto tu recuerdo sabor a café,
la fuerza del expreso amortiguada por unas gotas de leche,
tu lado dulce, ese que tanto escondes,
el que dice no al azúcar y saluda al chocolate.
Sí, recuerdo tu sabor a moca,
lo aspiro mientras escribo el pensamiento que me llega.
Redacto tu recuerdo ante el mar bravío,
aquel que hipnotiza tu visión y extiende tu brazo.
El mar que te impulsaba a no soltarme,
el único que llegó a saber cuanto en verdad pensabas.
Sí, recuerdo tensión y fuerza en tu rostro,
sabiéndote pura duda ante cual sería el siguiente paso.
Seguiré recordando, continuaré redactando lo que en verdad fue.
Una vida fuerte, impetuosa, loca…
páginas cargadas de risa, llanto, entendimiento, reproche,
páginas que siempre me llevarán a seguir adelante.
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Autor: Sole Moreira
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