Te veré una y mil veces
en el atardecer de mis silencios,
te sabré vida, pasión, reencuentro.
Te veré una y mil veces
en la flor que nace, en el campo que crece,
te sabré balsa a través del recuerdo.
Pasión indebida despertando fibras,
manos extendidas regalando dicha.
Te veré una y mil veces
donde nadie nos encuentre,
el rincón de mi alma que espera tu llegada.
Te veré una y mil veces
en mi cuento idealista,
dotando de optimismo mi mundo realista.
Te sabré verdad en mitad de la mentira
verdad que revitaliza mis idas y venidas.
_________________
Autor: Sole Moreira
Derechos reservados