Te soñé
soñé tu dulzura,
soñé tu autoridad.
Te soñé caballero.
Y alimenté mi sueño,
como lluvia de estrellas,
como toque de duende.
Te di vida en mis sueños,
con la fuerza del sentimiento,
con la pasión del amor,
tatuándote a ellos cada noche.
Mi caballero inexistente,
el que atiende, defiende, entiende.
Aquel que habla mi idioma.
Y en el sueño me aferro a tus manos,
se desgarra mi cuerpo y siento,
siento que sin ti muero,
que existes…que puedo.
Pero despierto,
despierto y no te encuentro.
Abro mis ojos, evoco el recuerdo.
Mi caballero inexistente,
aquel que se encuentra en todos y en ninguno,
aquel que pienso encontré a lo lejos,
aquel que sé no es cuando se acerca.
Autor: Sole Moreira
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