¿Por cuanto tiempo podemos detener una vida?
Un día…un mes…un año…
¿Cuanto más, vas a permanecer dormido?
Callado…distante…al margen…
No te engañes a ti mismo,
no basta con respirar cada día,
llegar a plantearse firmes propósitos
y esperar el momento idóneo para cumplirlos.
No hay vida en la espera,
solo incertidumbre y ansiedad.
Cuando lo deseado no llega
la sensación de fracaso va creciendo.
Mas, no te dejes vencer por la espera,
no alimentes el fracaso.
Piensa, que salvo lo imposible
todo llega en su momento.
Así pues no detengas tus días
por no ver cumplido el propósito.
Alimenta tus sueños con la realidad,
pero siempre viendo su lado positivo.
Toda vida tiene un fin,
todo fin lleva a una meta.
Y…cada hora te acerca más a ella,
mientras vives, mientras creas.
Sole Moreira