La leías, te tenía atrapado
no querías verlo, solo eran palabras,
un juego de bellas palabras que te negabas a ti mismo.
La leías, te tenía atrapado
el calor de lo escrito, el cariño impreso
un pequeño sueño hecho realidad que no creías merecer.
La leías, te tenía atrapado
le jurabas amor mientras la leías, la negabas cuando no estaba.
Te enamoró y eso te dio pavor. Tú ya no podías amar.
La leías, te tenía atrapado
el miedo a sentir más te llevó al abandono
olvidarla, desterrarla en mitad del hinóspito bosque.
Nunca temas el llegar a sentir,
deja de dudar sobre la realidad del amor.
El amor existe, es posible.
No juzgues a quien te ama pensando en quienes te han fallado
Autor: Sole Moreira
Fotografía: de la red
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