No sigas pensando que la vida no me ha enseñado
porque terminaré resquebrajándome ante la inseguridad.
No sigas viendo en mi a la niña que un día fui
porque, aunque sigue viva en mi, la niña ha madurado.
Deja de vigilar cada paso en aras de la protección
¿Quién protege a quién?
No dudes de mis silencios, son míos
parte de mi protección, de mi necesidad de ser yo.
No dudes de mis palabras…ya no
¿Acaso no te has dado cuenta de cuanto valoro la sinceridad?
Sigamos nuestra vida mas…
no veas obstáculo donde no existe.
No permitas que tus inseguridades
desgarren poco a poco mi alma.
Cree, en mi…en lo vivido
No necesito un protector, tan solo un amigo.
Algún día entenderás…
entenderás lo necesario de la amistad
lo bonito que es confiar
lo bello de dar sin más.
Algún día reconocerás a tu alma,
olvidarás al ser vigilante…
reconocerás tu necesidad de dar
brindarás por todo lo recibido.
Y ese día yo estaré ahí,
festejando el haberla encontrado,
celebrando el no haberme perdido ante tus miedos.
Estaré, seré y viviré por ti y para ti.