Dile a quien narra mi destino que ya no…
ya no cuente conmigo
ya deje de poner palabras en mi boca,
razonamientos en mi cabeza…
Ya no…no quiero necesitar de su pluma,
ahora quiero ser yo quien me escriba,
yo quien de un giro al argumento,
yo la que sopese pos y contras.
Desempolvaré los viejos cuadernos,
recordaré cada sí convertido en no,
toda experiencia reprimida porque no era el momento,
cuanto vivido por tú así quererlo.
Profanaré el blanco de sus hojas,
relatando cuanto quiero llegar a ser,
poniendo orden a cuanto queda por hacer,
construyendo una vida sola.
Sola…en el otoño de mi vida.
Sola…con la que a día de hoy se me antoja la mejor compañía,