¿Incertidumbre?…claro que sí
Quizás…quizás más de la que deseara o quisiera, pero…hay días en los cuales te levantas con mil preguntas en tu mente, cuestionando hasta que punto es correcto o no el rumbo que lleva tu vida, lo certero o erróneo de la decisión tomada. Y…cómo no, los daños colaterales, las consecuencias de cuanta decisión has tomado…
Mas, la compañía del café matutino, o el escuchar aquella melodía con la cual te identificas, suelen aclarar muchas dudas o mejor dicho aparcar a un lado la mayoría de ellas. Porque gran parte de esos pequeños tormentos son superfluos, pequeños matices salvables, inconvenientes que tan solo llegarían a ocasionar un ligero rasguño a su paso.
Es entonces cuando ese café y las sensaciones que evoca la melodía que lo acompaña te impulsan de nuevo hacia lo que en verdad quieres. Y las pocas inseguridades que puedan quedar se vuelven minúsculas ante la fuerza que emana de ti, ese resorte invisible que nos permite tomar impulso y actuar.
¿Incertidumbre?…sí, pero nuestros pasos siempre volverán firmes al camino trazado, porque la fuerza de lo deseado, la convicción de cuanto queremos y amamos es más fuerte que cualquier escoyo encontrado en el camino.