Tú, yo y este desastre de país 2

El viernes, la carga de trabajo resultó más pesada de lo habitual, pero había llegado la hora de poner rumbo a Asturias. Aunque en un principio, la pelea con sus vaqueros aumentó su desánimo; la vida sedentaria comenzaba a hacer mella en su cuerpo, (algo tendría que hacer con esos tres kilos de más, pensóSigue leyendo «Tú, yo y este desastre de país 2»