Prisionera de una sensación,
la intuición de que un nombre,
un olor… una voz… un sentimiento
existió y me atrapó en otro tiempo.
La sensación me llevó a un mar de dudas,
a redactar cada recuerdo,
plasmando en tinta el sufrimiento,
mientras la razón gritaba «guárdalo en el recuerdo»
Y ahora, ya no recuerdo tu nombre
pero sigo en pos de tu olor,
intentando hallar tu voz entre cientos,
luchando por volver materia la sensación.
Porque, a pesar de conseguirte solo recuerdo,
no desisto en el intento de encontrar,
conseguir el efecto de tu olor y tu voz
en este momento, en este tiempo.
____________________
Autor: Sole Moreira
Derechos reservados