Imagina,
la armonía de
una flauta al despertar.
Prueba,
el sabor del silencio que lleva a la verdad.
Nada acaba,
cada paso nos invita a comenzar.
Nada frena,
salvo el pánico a afrontar la realidad.
La advertencia de un stop
no es suficiente para callar tu instinto.
¡Estás vivo!
Todo puede traducirse en renacer.
Nada acaba,
si aprendes a escuchar tu propio silencio.
Nada frena,
tan solo hay que adaptar al
momento la nueva pisada.
Imagina,
la melodía caminando a tu lado.
Prueba,
atrévete a imprimir tu propio ritmo al día.
Vive adaptando el tiempo a tu tiempo.
Y sonríe,
sonríe porque has sido capaz de mantener vivo tu día.
__________________________
Autor: Sole Moreira